El clasificador de aire es un dispositivo de separación de partículas que utiliza el flujo de aire para clasificar las partículas según su tamaño, forma y densidad. Funciona introduciendo una corriente de aire en una cámara que contiene las partículas a clasificar. El flujo de aire hace que las partículas más ligeras y pequeñas sean arrastradas, mientras que las partículas más pesadas y grandes se depositan hacia abajo. A continuación, las partículas clasificadas se recogen y eliminan del sistema. Los clasificadores de aire se usan comúnmente en industrias como la minería, la cerámica, la farmacéutica y el procesamiento de alimentos para separar partículas y producir materiales con propiedades específicas. Ofrecen ventajas como alta precisión, bajo mantenimiento y bajo consumo de energía.